Por: Leydy Oviedo

El segundo día del Festival de Cine Corto de Popayán contó con la proyección de la Selección Oficial Documental en el Teatro Municipal Guillermo Valencia. Los asistentes disfrutaron de las diferentes narrativas expuestas en los cinco cortometrajes de la noche, en donde se abordaron historias que evidenciaban la necesidad de reconciliación y aceptación con el pasado de cada personaje.

Mancha’ de Raquel Tamayo, fue el primer corto proyectado de la noche, en donde se cuenta la historia de una niña de 11 años que tiene vitíligo -una enfermedad de la piel que se caracteriza por la aparición de manchas blancas en diferentes partes del cuerpo-, y que en un cuarto vacío intenta representar por medio de dibujos en la pared blanca, la manera en cómo se percibe a ella misma, preguntándose en este escenario, acerca del amor propio y de la relación con su cuerpo.

Truambi’ de la directora Mileidy Orozco, aborda la historia de una niña mestiza de dos años que vive un recorrido ritual junto a su abuela y tía en la tierra ancestral Embera Eyabida, con el objetivo que se florezca su arraigo cultural.

Reconocer’ un cortometraje de Ángela Gómez, expone una historia de metáforas entretejidas a través de la danza, como se menciona en la sinopsis ‘A partir de una carta de despedida, tras una ruptura amorosa, viajamos al interior del conflicto colombiano y la firma del Acuerdo de Paz entre el Gobierno y el grupo armado al margen de la ley, FARC. Un viaje orientado por cuerpos que danzan y llevan grabada en sus pieles esa historia.’

‘Elegimos recordar’ dirigido por Juan Manuel Galvis, se trató de un ensayo documental en donde se pregunta por la permanencia y el valor que damos a las imágenes en el contexto de la posfotografía. Siguiendo a fotógrafos y fotógrafas que trabajan con técnicas analógicas, y explorando la conformación de un archivo personal, se van tejiendo preguntas sobre la permanencia de las imágenes, los recuerdos y la memoria.

‘Memorias de Guamocó’ un cortometraje de Daniel Ifanger, y Mario niño, en donde se cuenta la historia de cómo grupos paramilitares irrumpieron en la región de Guamocó, ubicada en los límites de los departamentos de Antioquia y Bolívar, Colombia, entre el año 1996 y 2002. Diez años después, algunos habitantes comparten los recuerdos de la vida bajo el conflicto en una de las zonas geográficamente más estratégicas del país.

Los asistentes disfrutaron de una noche de mucho cine con las cinco historias proyectadas, así se dio fin al segundo día del festival y se extendió la invitación por parte de Juan Esteban Rengifo, director del Festival, para que se siguiera disfrutando de la mejor semana del cine corto en Colombia.